martes, 9 de marzo de 2010

¿ISLA O CONTINENTE?




Esa fue la ansiosa pregunta que se hicieron los protagonistas de “La Isla Misteriosa” (novela de Julio Verne) después de que un naufragio los arrojara en una costa desconocida.

Porque de la respuesta dependía TODO. ¿Estaban solos? ¿O no? ¿Podían esperar ayuda? ¿O se las tenían que arreglar? ¿Alguien llegaría a rescatarlos? ¿O se morirían de viejos al cabo del tiempo, abandonados a su suerte? ¿Les daría tiempo a construir alguna civilización con los restos de su memoria y de su barco?

Nenicos, leed el libro. Y mientras tanto, intentaré contestar a la famosa pregunta que me hacéis algunos.


¿Para qué sirve la sintaxis?


Unos dicen que para aprobar Lengua. Eso depende de los maestros de Lengua.

Otros dicen que la sintaxis es como la música. Sirve para disfrutar de la melodía del lenguaje. (Pero no hace falta saber solfeo para que nos guste escuchar música)

También es comparada con los juegos que sirven para ejercitar la mente: los crucigramas, los sudokus…

O, como actividad de análisis, sirve para estudiar el lenguaje por dentro, cómo está hecho, cómo funciona. (Tampoco es necesario saber cómo es el motor por dentro para conducir un coche)

Tiene algo de matemáticas, con palabras en vez de números.

La sintaxis enseña a pensar. Pone en funcionamiento los mecanismos que nos explican las relaciones de unas palabras con otras.

Eso es lo bueno. Si aprendemos a distinguir los sujetos de los predicados quizá en la vida sepamos diferenciar también las verdades de quien las dice y las mentiras de sus portavoces, muchas veces inocentes.

Si aprendemos a reconocer los núcleos en los sintagmas tal vez podremos reconocer lo esencial de las cosas y no dejarnos equivocar por lo accesorio.

Sabiendo separar el atributo del sujeto ¿seremos capaces de distinguir las acusaciones del acusado?

Y, conociendo los verbos transitivos e intransitivos, ¿podremos alguna vez hacer algo por otro distinto de uno mismo? ¿O reconocer cuándo nuestros hechos sólo son reflexivos o recíprocos?

Los complementos circunstanciales quizá nos enseñen algún día realismo y precisión, tanto en lo que hagamos como en lo que digamos.

De la voz pasiva… hablaremos otro día.

Las palabras no son islas. Andan todas ellas enredadas en múltiples relaciones. Como la gente. Por fortuna.





8 comentarios:

  1. Álvaro dijo:
    La verdad es que tiene razón, la sintaxis sirve para la rutina diaria , para diferenciar nuestro entorno, para expresarnos mejor, para poner en funcionamiento la mente, etc.
    Aunque, la verdad es que pienso que no todas las palabras ni mucho menos las personas, se relacionan entre sí ni van enredadas por un mismo lazo en común, por que cada persona es diferente al igual que las palabras.
    Profesora Sole dame algunos argumentos para hacerme convenzer de lo contrario, si es que tu piensas lo opuesto a lo mío...

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  2. Llevas razón. Existen las interjecciones, que irrumpen en el lenguaje como una fiesta o una catástrofe.
    Las personas sí tenemos un lazo común: somos contemporáneos. Aparte de esto pasa todo tipo de cosas como puedes observar.
    El lenguaje es otro lazo común, aunque muy discutido. La sintaxis trata de establecer acuerdos, o confirmar los que hay.
    Pero no quiero convencerte de nada, no hace falta que estemos todos de acuerdo, el mundo sería muy aburrido si todos pensáramos de la misma forma.

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  3. Gracias por la explicación, muy buena, como siempre, aunque, es mejor conversarla por aquí, donde ninguna clase de ruido nos puede interrumpir, no como en la clase...Esto me hace pensar, que en la vida, las personas somos interjecciones ,las cuales, manifestamos nuestra existencia irrumpiendo la vida de los demás como una fiesta o terremoto. Por eso sigo pensando que solo las palabras que se podrían parecer más a nuestro mecanismo de vida son las interjecciones.
    Que profundo...JAJA, un saludo Álvaro

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  4. Nunca se me había ocurrido que las personas somos como interjecciones. Claro que tú llevas nueve años viviendo día a día con esta clase que es una pura interjección exclamativa e incesante. Al poeta Vicente Aleixandre le gustaba "vivir en los pronombres". Esto de las interjecciones me parece que lo supera de largo. Es todo un reto. Ánimo.

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  5. Esta muy interesante.Podría enseñarnos como llevar nuestra vida o ir ordenándola.Algunas palabras pueden relacionarse con nosotros pero eso depende del estilo de la frase y como la quieras expresar

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  6. la sintaxis es muy interesante para aprender a analizar oraciones

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  7. ¿Pero cómo te va a organizar la vida la sintaxis? Habrá que buscar más cosas ¿no?

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  8. Jaja,¿quién es ese anónimo que piensa lo contrario
    de lo que ha dicho en el comentario Jesus?
    Un saludo: Álvaro

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